Muchas veces pienso en mi propia felicidad como mujer, y mi experiencia me ha marcado que al contrario de lo que se puede llegar a pensar, mi felicidad no depende exclusivamente de los acontecimientos externos, ya que por mucho que me empeñe no puedo controlarlos, la felicidad debe empezar y terminar en mi misma.
Este mensaje parece salido del mejor de los anuncios, imaginamos un equipo de marketing reunidos intentando vender felicidad, pero para que queremos nosotras las mujeres comprar felicidad, lo que necesitamos es buscarla en nosotras mismas…
En mis años ejerciendo la psicología clínica he encontrado a personas con la tristeza inmersa en su organismo siendo incapaces de buscarla dentro de sí mismos…. Por lo que a simple vista parece una tarea ardua...
Entonces yo como mujer debo buscar la felicidad o esperar que esta me llegue… parece que la respuesta es obvia pero a veces no es tan sencillo…
Muchas veces las circunstancias no son las propicias, o simplemente no estamos preparadas, por lo que yo como mujer me preguntaría estamos realmente dispuestas a ser felices…
La amargura, el amar con sufrimiento, las películas, los libros, nos venden una felicidad con sinónimo igual a sufrimiento… pero es realmente ese el camino; realmente queremos buscarla de esa manera…
Yo creo que mi felicidad empieza y termina en mi misma, seré feliz cuando sea capaz de dividir mis problemas, valorar todo en su justa medida, cuando cualquier cosa me emocione y habrá mi corazón, cuando en medio de la tormenta sepa ver la luz o simplemente cuando un amanecer ilusione mi mañana con la más bella de los sonrisas…
También es cierto que en la actualidad son muchos los obstáculos que se me presentan, obligaciones y responsabilidades cotidianas, pero esa fuerza está en mi, la poseo, por lo que porque no va a estar en todas las mujeres.
Al fin y al cabo yo como mujer soy capaz de hacer y crear vida.
Si parto de esta idea, también soy capaz de crear felicidad.
¿Qué es para ti la felicidad?
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